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Esparta contra Atenas

 


   


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Esparta contra Atenas

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Esparta nació alrededor del 900 a.C. de la unificación de cuatro aldeas preexistentes. Dentro de la ciudad había muchos campesinos esclavos, muchos más que los ciudadanos libres, con lo cual se hizo necesario gobernar la ciudad mediante una estructura admistrativa rígida, controlada por un senado restringido encabezado por dos reyes. Atenas se desarrolló en el primer milenio a. C., al principio como una monarquía, que sería controlada sucesivamente por el gobierno de los arcontes, gobernadores seleccionados por la aristocracia agraria.

Atenas y Esparta tienen en común el hecho de que se negaron areconocer la autoridad de los Persas, cuando unos 500 años antes de Jesús el emperador Ciro conquistó todas las ciudades estado griegas. El emperador persa exigió el reconocimiento de su autoridad y, tras el rechazo de Esparta y Atenas, envió una expedición que fue derrotada por los atenienses en la batalla de Maratona. Los persas, con ganas de revancha y encabezados por Serse juntaron un ejército aún más fuerte, mientras que los griegos no lograban crear un frente fuerte y compacto, sobre todo porque el hecho de que muchas ciudades querían aliarse con los persas. Fue sólo gracias a Esparta que se logró contener la avanzada del ejército de Serse, que había invadido ya Tesalia y Ática. De hecho Esparta logró reunir todas las ciudades griegas en una liga.

 

Sin embargo, a lo largo del conflicto contra Persia, Atenas logró conquistar una posición de prestigio sobre otras ciudades y esto contribuyó a su ascensión sucesiva, cuando se convirtió en la capital del mundo antiguo (gracias a la creación de una flota naval y de una liga naval para contrastar al enemigo). Esparta nunca había manifestado la intención de seguir con la campaña contra los persas; fue por eso que Atenas asumió el control de las operaciones de guerra y reunió las distintas ciudades griegas que en el pasado habían caído bajo la dominación persa. Así fue como nació un territorio unificado, capaz de incluir las ciudades del Egeo y la gran mayoría del Mediterráneo y del Mar Negro.

En los años sucesivos a la victoria sobre los persas, Esparta vio entonces su potencia redimensionarse dentro del Peloponeso, a favor de Atenas.

Enseguida se entendió el proyecto imperialista de Atenas, que ya no estaba dirigido hacia la defensa contra el expansionismo persa, sino para contrastar la potencia de Esparta. Esta política, empezada por Temístocles, ganador en Salamina, continuó con Pericles, que por más de 50 años fue jefe del partido democrático ateniense. Pericles se comprometió a poner en ejecución una enorme obra de democratización, por ejemplo introduciendo la retribución de los cargos públicos, de modo que éstos fueran accesibles para las clases más desfavorecidas. En política exterior fue muy activo; además contribuyó e inspiró un período de florecimiento cultural y artístico.

 

El enfrentamiento entre Esparta y Atenas se hizo inevitable: Esparta pretendía mantener el control dentro del territorio de la liga del Peloponeso además de su sistema político oligárquico; Atenas en cambio se proponía alcanzar la expansión y la democratización. El conflicto se desencadenó en el 432 cuando Esparta declaró guarra a su rival. La guerra, conocida con el nombre de guerra del Peloponeso afectó una gran parte de l mundo griego saldría del conflicto profundamente chocado. Durante el primer año de conflicto, una gravísima epidemia de peste flageló Atenas, en la cual murió el mismo Pericles, pero lo que llevó la ciudad a la derrota definitiva fue sobre todo la decisión de llevar la guerra a Sicilia, atacando Siracusa,  colonia de Esparta. La expedición de los atenienses en Sicilia fue un desastre y en 404 a.C. la ciudad de Atenas, bajo asedio, se vio obligada a rendirse. Esparta concedió a Atenas unas condiciones de paz generosas: la ciudad fue desmilitarizada y se impuso un gobierno oligárquico.  Tras la conclusión de la guerra del Peloponeso que duró casi treinta años, en Grecia hubo un período de paz y la supremacía de Grecia duró por muchos años.

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